La importancia del manejo, administración, cuidado y gestión del agua por parte de comunidades organizadas, durante muchos años ha dado muestra de una cultura de cuidado, ahorro y criterios de equidad y solidaridad en su distribución. De esta manera, la gestión comunitaria ha representado una forma de participación que lleva consigo un proceso de toma de decisiones en el que se ponen en discusión criterios que van desde lo administrativo hasta la sostenibilidad ambiental, lo cual ha ido permitiendo que los acueductos comunitarios se preocupen por atender las necesidades y demandas de la población buscando incidir de manera positiva en la construcción de sus territorios con miras a su autonomía, defendiendo principios de solidaridad, responsabilidad y un alto compromiso por la defensa por el agua.
El IMCA y las organizaciones sociales encargadas de la administración de los acueductos comunitarios junto con otras organizaciones conscientes de esta realidad han venido planteando en innumerables espacios la preocupación sobre el tema de la gestión del agua, puesto que la forma como se administre y maneje este recurso y se orienten las políticas públicas, va a manifestar el peligro o no de los sistemas comunitarios de manejo, el acceso al vital líquido y las lógicas de desarrollo y producción; es así como el protagonismo del sector privado o de los operadores especializados, pueden arrebatar el manejo que tienen las comunidades organizadas.
En este sentido, las enormes desigualdades de poder entre los diversos actores del mercado del agua dan un matiz de dificultad a la situación de los acueductos comunitarios los cuales, indudablemente, han cumplido y cumplen un papel importante en los distintos territorios. Las comunidades organizadas se han encargado de administrar la prestación de un servicio de agua que, en la medida de lo posible, pretenda ser permanente y seguro para las poblaciones beneficiadas. Para ello, resulta importante la gestión integral desde la cual no sólo es importante el servicio de suministro sino también el bienestar general y colectivo pensando, entre otras cosas, en la reforestación y conservación de la cuenca, técnicas de tratamiento, sostenibilidad y autogestión de todo el sistema de gestión comunitaria.
Con base en los retos y las lógicas que se van perfilando respecto a la normativa existente y a las distintas iniciativas de políticas públicas que el gobierno viene impulsando, la Federación de Acueductos Comunitarios del Valle del Cauca (FECOSER), con el apoyo y asesoría del IMCA, viene fomentando un proceso social que busca promover la articulación de las diferentes formas organizativas encargadas de la administración de acueductos comunitarios en espacios municipales y regionales, así como también, la articulación con otros aliados que reconocen la importancia de la gestión comunitaria del agua, aspecto considerado clave y trascendental para avanzar en la identificación e implementación de propuestas comunes que favorezcan la función preponderante que viene desarrollando este importante sector principalmente de la zona rural.
Por tal motivo, el pasado 17 de septiembre de 2014, se dieron cita delegados de FECOSER, IMCA, docentes y estudiantes de la Facultad de Derecho de la Pontificia Universidad Javeriana Cali, para concertar una propuesta de acompañamiento que permita el fortalecimiento de los procesos de articulación de las organizaciones encargadas de la gestión comunitaria del agua en el Departamento del Valle del Cauca. Esta alianza estratégica avanzará en torno a un proceso de capacitación que abordará temas claves como el derecho humano al agua, la formalización de las organizaciones sociales, asesoría jurídica a casos concretos de problemáticas que tengan los acueductos comunitarios, entre otros temas. Bajo el lema “saber es poder”, la Pontifica Universidad Javeriana aportará elementos y herramientas para que los líderes y lideresas de las organizaciones comunitarias gestoras del agua ganen habilidades para su fortalecimiento y la cualificación del actuar en sus territorios y en los espacios de participación ciudadana.
Así mismo, el 20 de septiembre de 2014, delegados del IMCA participaron en una reunión donde se dieron cita FECOSER y los representantes del proceso de articulación que se viene desarrollando en el Municipio de Calima-Darién. Esta dinámica de encuentro y articulación que se ha gestado por iniciativa de las mismas organizaciones sociales, estuvo orientada a hacer seguimiento al contexto local y a los avances del proceso de caracterización de los acueductos comunitarios que existen en la zona rural. La caracterización de los acueductos es una actividad apoyada financieramente por FECOSER y que será clave para la concertación con entidades y actores que le quieran apostar al bienestar colectivo de las familias campesinas.
Es importante reconocer que estas y otras dinámicas que se vienen concretando a favor de la gestión comunitaria del agua, pretenden fortalecer a las organizaciones sociales encargadas de la administración de los acueductos comunitarios, aportar en la solución de los enormes retos que tiene este sector, colaborar en la defensa del territorio y del agua como derecho humano fundamental; así como contribuir en la conservación del medio ambiente y los servicios ecosistémicos.
Redacción y Fotografía
Pedro Antonio Ojeda Pinta
Jessica Andrea Henao Escobar
