El pasado 9 de mayo de 2015, en el Municipio de Restrepo (Valle del Cauca – Colombia), la Clínica Jurídica de la Pontificia Universidad Javeriana Cali, desarrolló un taller que permitió continuar profundizando en las diversas problemáticas que tienen las organizaciones comunitarias que gestionan el agua en la zona rural de este territorio. A partir de este ejercicio participativo, se buscará identificar los puntos comunes que tienen los distintos problemas y retos que presenta el sector, de tal manera que se pueda seleccionar un caso emblemático que sirva de referente para llevar a cabo acciones litigiosas y no litigiosas de defensa del agua y del territorio.
Este proceso que inició a finales del año pasado, se viene desarrollando concertadamente entre la Clínica Jurídica de la Universidad Javeriana, la Federación de Acueductos Comunitarios del Valle del Cauca – FECOSER, la Junta Central de Acueductos Comunitarios del Municipio de Restrepo, y el Instituto Mayor Campesino – IMCA. En esta oportunidad, se contó con la participación de más de 40 personas, entre ellas, representantes de las organizaciones comunitarias gestoras del agua en la zona rural del Municipio de Restrepo, la directora de la Unidad Municipal de Asistencia Técnica Agropecuaria, directivos de la Junta Central de Acueductos Comunitarios, el representante legal de FECOSER, los codirectores y estudiantes investigadores de la Clínica Jurídica de la Universidad Javeriana, y un promotor social del IMCA.
Para el doctor Raúl Fernando Núñez, codirector de la Clínica Jurídica “El Municipio de Restrepo tienen la posibilidad para desarrollar un litigio limpio, concentrado en el tema de la gestión comunitaria del agua”. Entre algunas de las razones que mencionó y resaltó de este escenario seleccionado, se destacan las siguientes: a.) La existencia de una comunidad organizada y cohesionada en torno a la gestión comunitaria del agua, b.) La presencia de liderazgos comprometidos con el proceso, c.) La articulación y el trabajo solidario entre IMCA, FECOSER y la Junta Central, d.) El respeto de las organizaciones comunitarias y sus líderes y lideresas, por el proceso desarrollado por IMCA y FECOSER, y d.) El respeto y reconocimiento que tiene el proceso frente al gobierno municipal, quien además se suma y apoya la dinámica en distintos espacios. “Es importante destacar que este proyecto que venimos desarrollando cuenta con el respaldo institucional de la Pontifica Universidad Javeriana y del Provincial de la Compañía de Jesús en Colombia…”, afirmó por su parte, el doctor Sebastián Canal, quien también se desempeña como codirector de la Clínica Jurídica.
Durante la jornada de trabajo, se socializaron los principales problemas que se identificaron luego del primer taller desarrollado a finales del año pasado y que se resumen en los siguientes aspectos: 1.) Multiplicidad de conflictos por el uso del agua; 2.) Intervención de otros actores generadores de los conflictos por el agua; 3.) Problemas y dificultades en la aplicación de las normas existentes; 4.) Problemas relacionados con la titularidad de la tierra donde se encuentran los nacimientos y la infraestructura de los sistemas comunitarios de abastecimiento de agua; y 5.) Ausencia de la garantía que debería ofrecer la autoridad ambiental.
A partir de estos hallazgos, con la orientación y acompañamiento de los docentes y estudiantes investigadores de la Clínica Jurídica, las personas participantes tuvieron la oportunidad de dialogar, compartir sus experiencias y seguir profundizando en las problemáticas; de tal manera, que con estos insumos aportados desde la realidad que viven las comunidades campesinas en sus territorios, se pueda ir configurando el caso emblemático. Es importante destacar que la dinámica de trabajo permitió la interacción y la participación propositiva de cada una de las personas representantes de las organizaciones comunitarias gestoras del agua en el Municipio de Restrepo. “Esperamos seguir caminando de su mano y contando con su apoyo por el bienestar de nuestras comunidades y el mejoramiento de nuestros sistemas de abastecimiento de agua tradicionales”, aseveró Olga Montealegre, gestora comunitaria del agua de la vereda El Agrado.
Redacción y Fotografía
Pedro Antonio Ojeda Pinta