El pasado 31 de octubre de 2019, se llevó a cabo la ceremonia de graduación de 48 personas que culminaron el Diplomado en Agroecología y Territorio, proceso formativo desarrollado por el IMCA para líderes y lideresas de organizaciones campesinas de los municipios de Buga, Tuluá y Ginebra. Este proceso formativo se desarrolló a través de 10 sesiones de trabajo, donde se incluyeron clases magistrales, actividades prácticas y giras de campo. El diplomado fue avalado por la Pontificia Universidad Javeriana Cali y fue financiado por la Agencia Francesa de Desarrollo – AFD, CCFD Terre Solidaire, DKA y Acting For Life.
La ceremonia tuvo tres momentos, en el primero de ellos se realizó un diálogo y reflexión en torno a la agroecología y la incidencia política; en el que se enfatizó sobre el carácter integral de la propuesta agroecológica, la cual no sólo es un modo de producción cuidadoso con la vida y la naturaleza, sino también es una apuesta profundamente política de transformación. Asimismo, se compartió la experiencia de formulación de la Política Pública de Desarrollo Rural Integral del municipio de Buga, que incluyó la propuesta agroecológica gracias a la gestión de líderes campesinos del municipio. Finalmente, se motivó a participar activa y propositivamente en el proceso de formulación de los planes de desarrollo municipal 2020 – 2023.
“Tenemos que pensar en el bienestar de las actuales y futuras generaciones, los niños y niñas son esa semilla que debemos cultivar para que puedan contribuir efectivamente en el cambio de esos comportamientos que nos están llevando a un estado de caos generalizado. La apuesta debe estar allí y por eso invito a los compañeros y compañeras a concentrar esfuerzos en ese sentido, pues los niños y niñas son el futuro, el futuro esperanzador que se necesita construir”, aseveró Andrea Mallama, realizó el diplomado, es Psicóloga del Hogar Infantil Mi pequeño Mundo del municipio Ginebra.
En un segundo momento, se aplicó un instrumento para valorar los aprendizajes y puesta en práctica de los conocimientos adquiridos por las personas participantes del diplomado. Este ejercicio es fundamental pues permite evidenciar las bondades de las temáticas y metodologías aplicadas en el proceso formativo, así como la cualificación de aquellos aspectos que los participantes consideran como retos o dificultades.
En el tercer y último momento se llevó a cabo la ceremonia de entrega de los diplomas a las 48 personas participantes que culminaron satisfactoriamente el proceso formativo y que cumplieron los requisitos académicos. Durante este acto se hizo reconocimiento, a través de certificados de participación, a Mariana Quintero y Ángela Trochez, dos niñas menores de 10 años, quienes acompañaron a su mamá y participaron activamente en las respectivas sesiones de formación del diplomado. Este momento también fue el espacio para los discursos, tanto de la dirección del IMCA como de los representantes de los graduandos; al final se realizó una presentación artística y se culminó con un brindis donde se compartieron algunos sentires de los participantes.
“En nombre de mis compañeros y compañeras de estudio agradezco al IMCA los conocimientos que nos transmitieron con toda paciencia y que ahora nos permiten mejorar nuestros sistemas productivos a nivel de finca. Asimismo, valoramos como muy positivo la oportunidad de conocer territorios y experiencias exitosas de producción agroecológica, con lo cual complementamos la teoría con la práctica”, señaló Leydi Johana Pabón, joven rural del municipio de Tuluá.
Redacción
Pedro Antonio Ojeda Pinta